Baby Boom

Nunca había visto este programa y ayer fue mi primer día. Tengo que decir que fue por casualidad, haciendo zapping pero, tanto mi marido como yo, nos quedamos enganchados.

Lo primero que pensé es "madre mía si yo hace 7 meses que di a luz y parece ya un siglo, cómo pasa el tiempo"; lo segundo que pensé es que quiero tener más, que es la experiencia más maravillosa del mundo y todas las mamás me comprenderéis y sabéis a lo que me refiero; tercero, pensé que tiene que ser tan traumático para un bebé, en cuestión de segundos, dejar su espacio, líquido, calentito, silencioso y pasar a un mundo de ruidos, luz, tener que respirar por si solo, el frío....menos mal que los pobres no se van a acordar pero tiene que ser tan fuerte para ellos!

También pensé que cada parto es diferente a cualquier otro, cada mamá es un mundo, cada bebé también, puede que se te adelante o que salgas de cuentas y se haga de rogar, puede que tenga algún problema, puede que el parto se complique o puede que no, pueden pasar tantas cosas, pero siempre está la fuerza de los papas, el deseo por tener un bebé, el amor incondicional que ya empieza desde que ves en el predictor un positivo y la ilusión por tenerle entre tus brazos. Te dan tanto que es una maravilla, un milagro y una oportunidad tan hermosa que sólo por vivirla y verle la carita y tenerle entre tus brazos, merece la pena todo lo demás. 

Por último, cuando vi a mi marido también con la lágrima (y no es fácil verle llorar) supe que aunque él no haya tenido a nuestros hijos en la tripa, aunque él no haya pasado por los pujos, aunque él no les ha dado de mamar, pensó como yo, que es lo más maravilloso del mundo, de nuestro mundo, nuestros hijos: Iker y Olivia.