Feliz 2014

Madre mía cómo pasa el tiempo, verdad? pues sí, pues sí, ya estamos en el 2014 y hace nada jugaba con mis amigos a cuántos años tendríamos en el 2000, pero de eso ya hace unos cuantos años y hay que mirar hacia adelante y no hacia atrás.

Digo adiós al 2013 agradeciendo muchas cosas, tengo dos niños maravillosos, una familia estupenda, poco amigos pero de calidad y un trabajo, que hoy en día no es moco de pavo. No soy una persona ambiciosa así que para mí es más que suficiente y no le pido a la vida nada más, sólo salud, salud y más salud. Disfrutar de pequeños momentos, de los abrazos que me da Olivia cuando me tumbo junto a ella, con la sonrisa de Iker y con sus gestos de "mayor", con el apoyo de mi marido, de disfrutar del sol, de relajarme con un masaje de mis peques, de reírme por una guerra de cosquillas, por la sensación de protección cuando mis hijos se acurrucan junto a mi, por sentir su respiración junto a mi cara, por saltar en las olas, por mirar con los ojos de un niño, por sentir ese amor grande y puro, por una caricia de Jon, por un paseo de la mano, por echar carreras por la calle, por cantar en el coche cuando vamos de viaje, por esos besos pequeños y dulces, por hablar del día a día, por un café leyendo un periódico, por un paseo cerca del mar, por una sesión de peluquería de Olivia con sus pequeñas manitas, por un baño con mis hijos, por tomar un helado, por el txacolí muy frío, por la cara de felicidad cuando sale Iker del cole, por descubrir cada día que pasa que puedo querer más y más. 

Os quiero desear a todos lo mismo: Disfrutar de la vida, de los pequeños momentos, de las caricias, de los abrazos, de los gestos y besos de las personas que queréis.